Qué es en realidad el co-packing?

Explicamos los términos

El término "co-packing" se refiere a un servicio de producción y logística. En este caso, una empresa subcontrata la producción, el envasado, la recogida y el embalaje de los productos a otro fabricante.

Las empresas de co-packing también son conocidas internacionalmente como empacadores por contrato o co-packers. Otros términos son "contract packer", "contract packer" o "contract packer". En la industria de las bebidas, el servicio se denomina específicamente llenado por contrato, ya que el socio contractual se denomina embotellador o llenador por contrato.

Durante muchos años, varias empresas en Europa han estado ofreciendo soluciones de embalaje para las industrias de bebidas, alimentos, farmacéutica, química o cosmética. El co-envasado es interesante para toda empresa que fabrica productos envasados en latas, botellas, cartones, cajas, sacos y otros tipos de envases. Las máquinas de llenado y envasado están sujetas a un constante desarrollo, de modo que se dispone de diferentes soluciones de envasado en diferentes formatos y cantidades.

¿Qué implica el co-packing?

Una empresa encarga a otra empresa que produzca, empaque, reempaque o co-empaque sus productos. No se centra en el desarrollo y la producción de envases. El servicio en sí se ofrece y se lleva a cabo, adaptado a las necesidades individuales del cliente respectivo. Por ejemplo, los fabricantes, minoristas, mayoristas e intermediarios o las empresas de logística y transporte pueden adjudicar el contrato.

Las habilidades técnicas y organizativas se utilizan para posicionar el producto de forma innovadora en el mercado. Desde el diseño de los conceptos de embalaje hasta el conocimiento de las condiciones logísticas, la empresa de embalaje debe estar posicionada profesionalmente. Esto también incluye controles de calidad exhaustivos.

¿Cuáles son las ventajas del co-packing?

Aprovechar este servicio tiene varias ventajas: Los clientes pueden esperar mucha experiencia, ahorro de tiempo y más flexibilidad. Al mismo tiempo, la calidad y la fiabilidad del proceso aumentan porque los expertos se hacen cargo de la producción. Al optimizar los procesos de producción, es posible concentrarse en el negocio principal. Además, se pueden reforzar áreas como el desarrollo y la comercialización. El resultado es un enorme aumento de la competitividad.